En la viña.

A tantos de tantos del dos mil tantos.


La vuelta al trabajo ha empezado como no podía ser de otra forma, bien. A  media mañana he ido a entregar una documentación  a la Junta de Andalucía, donde después de esperar mi turno he acudido a mi mesa correspondiente me esperaba una FUNCIONARIA.  Lo escribo en mayúsculas sin acritud y sin desmerecer su nombre, al revés lo expreso así por su buen hacer.
La mujer que me ha atendido ha sido eficaz, amable, comprensible y sobre todo competente. Me ha ayudado a rellenar parte de los impresos  incluso como hacerlo, y sin abandonar la sonrisa.   
Muchas veces vamos con prejuicios, cómo nos van a tratar o si van a cumplir con su trabajo , y sinceramente creo que estamos un poco equivocados.    En la viña del señor tiene que haber de todo, y quizás si actuáramos con más educación y saber estar, todos  funcionaríamos mejor. 
Las veces que acudimos  a los organismos oficiales es para solucionar problemas o para quejarnos, y  vamos como demonios, pero eso si queremos que nos atiendan bien y para esto al menos tendremos que  usar lo que todos sabemos pero que pocos  utilizan, Educación.

  Partiremos de la premisa de que ellos no tienen la culpa de los problemas que tienen que solucionar, y que ante todo son personas.
La gente que trabajamos cara al público, valoramos mucho  la actitud de las personas que atendemos y esta nos prima  para su atención,  y es sin darnos cuenta.



La cuestión que el respeto, es fundamental para las relaciones humanas y si no lo utilizamos con los demás  ¿cómo pretendemos que nos traten así? 
 En todos los ámbitos de nuestra vida es lo primero que tenemos que sacar de la chistera, una sonrisa, educación y respeto, con esas tres  herramientas seguro que tendremos muchas puertas abiertas.


Volviendo al tema que nos ocupa, agradecer el buen trato que ha empleado conmigo y quiero pensar que es así con todo el mundo, y aun sabiendo que es su trabajo, quiero agradecerle su buen hacer.
Sé que seguro has tenido alguna experiencia menos buena que la mía, pero de todas formas quiero romper una lanza en su  favor.
Por cierto no soy funcionario.

Ahí os lo dejo. Si por casualidad alguna vez de lo que os cuento, escribo, comento, informo, difundo, traslado no os gusta, os diría que los siento, pero no es verdad, es lo que pienso.

Saludos.
Miraketediga.


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