Hormigon armado
A tantos de tantos del dos mil tantos.
Hay bastantes
enfermedades, que están desde que el
mundo es mundo entre nosotros y por unas
circunstancias u otras no se les ha encontrado solución. Algunas de estas, se moriría
la gente y no sabrían el porqué, y otras que han surgido nuevas si se les puede
llamar así.
Se han llevado a muchas
personas y se han conseguido erradicar,
y otras que aun conviven con nosotros , con las consiguientes bajas. Se les intenta dar solución mediante vacunas
y dependiendo de la zona del mundo donde este mas afianzada le interesa al mundo “desarrollado” investigar
o no.
Hay algunas que resurgen y que rápidamente
se eliminan con un simple tratamiento o con una simple vacuna y otras que ponen
en jaque a países enteros incluso a
continentes y como no a todo el planeta.
Cuando el contagio es bastante
peligroso se movilizan todos los países, medios de prevención, protocolos inmensos,
y todo lo que mediáticamente conlleva que no es poco.
Cuando las noticia empiezan a
dar rienda suelta a su maquinaria es increíble
como dependiendo del medio la enfermedad la tenemos ya todos o aun no aparecido.
Eso si algunas otras, son mas selectivas y solo les ataca a una especie
humana en concreto. Los síntomas de esta enfermedad son varios muy concretos.
La ambicion, al agonia, egocentrismo, el poder, y perdida de razocinio.
La corrupción no es una
enfermedad que tenga una cura con medicamentos , para erradicarla es tan fácil como
fabricar hormigón , para fabricar mas cárceles .
El aislamiento permanente es la solución así evitaríamos
que contagiaran a más gente y no les den
ideas en convertirse en políticos y automáticamente en corruptos.
El contagio se hace mediante
sobres, maletines , trajes, y cuentas en suiza y lo más gracioso es que sabemos
cómo, sabemos dónde, sabemos quién y sin embargo dejamos que sigan propagando
esta enfermedad que hace traer de cabeza a todo un país o mejor dicho a todo un
planeta, por que en todos y cada uno de los países de una u otra forma existe.
Nos escandalizamos cuando una
enfermedad entra en nuestro país, todos a buscar solución y remedio, como no
puede ser de otra forma , pero la pregunta es, ¿ no podemos quitarnos a todos
estos contagiados que hacen mal su trabajo para estar pendientes de su
enfermedad?
Eso si ,quiero contagiarme cada día, o contagiar al mundo con otra enfermedad que deberíamos tener
todos, la alegría. Te invito a que contagies a todos, es tan sencillo como sonreír.
Lo dejo ahí.
Si por casualidad alguna vez de lo que os cuento, escribo, comento, informo,
difundo, traslado no os gusta, os diría que lo siento, pero no es verdad, es lo
que pienso.
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