Litonto
A tantos de tantos del dos mil tantos.
Me gustaría saber, que alguien
me explicara porqué los tontos tienen la
habilidad de hacerse los listos y los listos se hacen los tontos cuando ven que
los tontos pasan por listos.
Cada uno debería estar en el
sitio que les corresponde y hacer su trabajo acorde a los conocimientos y
capacidad para ello. Un ejemplo que se me viene a la cabeza como profesión que
esta legislada y no es otra que la de político. Es de las profesiones que
cualquiera puede ser sin tener ninguna
titulación que lo acredite.
Profesiones que tienen una
denominación específica con su titulación y que sin embargo muy pocos la
tienen. Cualquiera puede ser concejal de
cultura, urbanismo, medio ambiente, etc ...sin tener la más mínima idea de dichos campos,
sin carrera política y mucho menos con conocimientos para desempeñarla.
Alcaldes que son cualquier cosa
menos políticos, simplemente cierto carisma entre los habitantes de la localidad,
ya con eso es suficiente. Representantes
de un país que no saben hablar ingles , gestores
de localidades carentes de capacidad de
organización, etc etc.
Entiendo que para los 128.000 políticos que habitan en este
país, quizás las universidades tendrían
que plantearse el aumento de plazas para tantísima gente que se sube a
concejalías por el mero hecho querer ser
políticos. Y no vamos a entrar en números
totales de tanto sueldo.
El exigir un mínimo de
cultura para desempeñar el cargo debería ser algo más que obligatorio,
conocimientos mínimos obligatorios, tener la capacidad más que suficiente para realizarlo
con solvencia. No es lo mismo concejal
de medio ambiente, que concejal de urbanismo, totalmente opuestos nada más que
por concepto, la gestión debe ser
distinta.
Una empresa privada que se
juega el dinero ¿contrataría a muchos de los que están gestionando la economía de una ciudad o pueblo? Seguro
que no, perder dinero de una manera tan descarada no está en plan de la inversión privada. Pero claro como el
dinero que hay que gestionar es público, hay margen para “equivocarse”.
Me pregunto el porqué, ¿tan
difícil es exigir un mínimo de competencia?
Sin entrar en valores que se presuponen que existen dentro de las
personas que nos gobiernan, pero esto no
se puede regular, o se tienen o no.
Dentro de lo malo, hay que dar
gracias que a los médicos se les exige una titulación para ejercer, porque si no
tendríamos unos cuantos matasanos en nuestros hospitales.
Lo dejo ahí.
Si por casualidad alguna vez de lo que os cuento, escribo, comento, informo,
difundo, traslado no os gusta, os diría que lo siento, pero no es verdad, es lo
que pienso.
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