Sin respiro.
A tantos de tantos del dos mil
tantos.
En ocasiones veo…….. Y otras cierro los ojos para no ver lo
que es más que evidente. La manera en que vemos las situaciones de la
vida se hace muy distinta, tanto por
razones propias como por lo que nos rodea.
Esta vida que no da respiro,
vamos a mil por hora y nos lleva a tomar
decisiones inesperadas o resolver problemas que por otra parte se pueden
resolver solos.
Queremos tener control absoluto,
tarea imposible aunque pensemos que podemos.
Lo mismo estamos abajo y algo no hace estar arriba que al revés y no sé porque
el que sea de arriba abajo parece que sucede con más frecuencia, pero en
realidad es porque tendemos a quejarnos y ver más lo negativo que lo positivo.
Deberíamos estar en modo alegría
siempre, buscar el lado positivo y no
dejar que un mínimo detalle sin importancia nos amargue la existencia.
Los problemas llegan solos, es recomendable abrir la puerta y dejarlos salir,
no los retengas en tu casa o dentro de ti ¿para qué? ¿Para hacerte sufrir? No sirve de nada estar
con su compañía, más que nada porque son cansinos y pesados y normalmente se
crecen cuando en realidad no son nada, si le das la poca atención que merecen
se diluyen.
Tomar una decisión para coger
un camino puede ser acertada o no, lo malo es estar cambiando constantemente, sin un rumbo
definido. Tomar un mal camino y cambiar para mejorar, pero volver al mismo
para coger los mismos baches no es lo lógico.
Escudarse en algo para no ser
capaz de afrontar la realidad, vivir con miedo
o sentir que no estas a gusto no es que deberíamos soportar para encontrar
una vida con calidad.
Lo que estorba fuera, a la
basura, (por no decir otro sitio), es fácil, todo lo fácil que tú quieras que
sea. La manera en que se ven las
situaciones puede ser parte de la manera
que tomes las decisiones, no es bueno
que entre en juego el miedo, si este participa de antemano la partida ya la
tienes perdida.
Hay muchos factores que pueden jugar,
riesgo, aventura, confianza, satisfacción, y mil más, decisión que se toma en
un momento o en mil, ¿cuál es el camino? Tú decides, y teniendo en cuenta que
el tren muchas veces solo pasa una vez.
Haí lo dejo. Si por casualidad
alguna vez de lo que os cuento, escribo, comento, informo, difundo, traslado no
os gusta, os diría que lo siento, pero no es verdad, es lo que pienso.
Comentarios
Publicar un comentario